El Valle del Cauca se convirtió en el primer departamento de Colombia con Plan de Agroecología, una apuesta del gobierno de Dilian Francisca Toro para garantizar un uso responsable del suelo, que permitirá retornar a los cultivos libres de tóxicos para el consumo sano de alimentos.
“Hoy es un día histórico para el Valle del Cauca porque tenemos la ordenanza del Plan Agroecológico 2024-2035, queremos hacer esa transición a producir y consumir productos limpios y sin químicos. Este proyecto de ordenanza fue construido en colectivo, aquí estuvieron vinculadas asociaciones de mujeres rurales, jóvenes, afrodescendientes, indígenas, todas las comunidades y la academia, que le apuestan a la agroecología para la vida”, explicó la bonaverense Ángela Reyes, secretaria de Desarrollo, Rural, Agricultura y Pesca del Valle.
Joaquín Emilio Agudelo, productor agroecológico del corregimiento de Venus en Tuluá, celebró la probación y señaló que “para nosotros es una victoria que tengamos ya construido este Plan Departamental de Agroecología que nos permite realizar algunos proyectos para que nosotros los campesinos podamos cosechar productos sanos y poder contribuir a la salud preventiva de todos los consumidores, ya que quien come alimentos sanos, vive sano”.
Entre tanto, la productora del corregimiento de La Marina en Tuluá, Deysi Liliana Villas Granada, destacó los beneficios, “hago parte de las familias campesinas productoras del país que soñamos con tener un plan que esté enmarcado en la agroecología, que contenga todos los valores y todas las características que como personas y como mujer campesina nos han caracterizado a través de los años”.
El Plan Agroecológico Departamental fue construido de manera colectiva con participación activa de las comunidades que habitan en las cuatro subregiones del Valle del Cauca y contó con el apoyo de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura FAO, la Unión Europea y la Agencia Italiana de Cooperación. “Este Plan se viene construyendo hace más de 30 años en una lucha de académicos y campesinos que hemos creído en esta forma de pensamiento como una expresión para reivindicar la vida”, concluyó el diputado ponente Juan Carlos Rengifo.
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